Eucharist Miracle Eucharist Miracles

Carta mandada el 29 de febrero 2004 por el Obispo Claudio Gatti a sus ex compañeros de Seminario, con ocasión de su 41º aniversario de ordenación sacerdotal

Carísimos hermanos,

Agradezco mucho vuestra invitación a participar en el encuentro anual para celebrar juntos "el 41º aniversario de nuestra ordenación sacerdotal".

Deseo que la invitación no sea una iniciativa de pocos, sino una decisión de todos.

Espero que nuestra relación, interrumpida desde hace decenios, pueda volver a retomarse en el futuro.

El Señor se ha dignado benignamente hacerme conocer mi futuro que, por Su voluntad, "será luminoso y grandioso".

Si queréis formar parte de mi futuro, tenéis que formar parte de mi presente que es muy combatido, probado y doloroso.

Formar parte de mi presente significa:

1 - aceptar que la Madre de la Eucaristía se aparece a Marisa Rossi y que estas apariciones marianas son las más importantes de la Historia de la Iglesia;

2 - creer que Dios ha obrado en el lugar taumatúrgico los más grandes milagros eucarísticos de la Historia de la Iglesia, sobretodo el ocurrido en mis manos durante la celebración de la S. Misa, del cual incluyo una documentación fotográfica.

3 - reconocer que Dios me ha ordenado obispo; ésta es la primera ordenación episcopal que Dios ha hecho después de la de los apóstoles y será la única en la Historia de la Iglesia.

Me doy cuenta que haciendo estas peticiones, ofrezco a mis calumniadores el pretexto para juzgarme soberbio y presuntuoso, pero no puedo callar todo lo que Dios ha obrado y comunicado para dar gusto a los hombres: "La verdad os hará libres" (Jn. 8, 32); esto es lo que ha enseñado Cristo.

Por otra parte, formar parte de mi presente puede significar también ser perseguido "por los grandes hombres de la Iglesia", ser privado de la parroquia o del trabajo y maltratado por la censura eclesiástica. A estos sufrimientos pueden añadirse, como me ha sucedido a mi, el que os den la espalda, el abandono y la traición de los hermanos y además de los parientes que pueden llegar a consideraros locos; también Cristo fue considerado loco por sus parientes (cfr. Mc 3, 21)

Me permito dirigiros a vosotros la misma pregunta que Jesús ha dirigido a los hijos del trueno: "¿Podéis beber el cáliz que yo he de beber?" (Mt 20, 22)

Marisa y yo hemos respondido SÍ en el lejano 1973 en Lourdes y desde entonces empezó nuestra dolorosa subida hacia el Gólgota, donde hemos encontrado y abrazado a Jesús Crucificado.

De todos modos creemos firmemente que después de la muerte hay la resurrección y ya entrevemos la luz pascual.

Desgraciadamente a causa de los trabajos improrrogables, no podré estar en Rimini para celebrar con vosotros la S. Misa y dar gracias al Señor por el don del Sacerdocio.

Os prometo que el 7 de marzo os encomendaré de manera particular a la Madre de la Eucaristía durante la aparición habitual que precede a la celebración de la S. Misa.

Os saludo "in osculo santo" ["con beso santo"] (2 Cor 13, 12)


Claudio Gatti

Ordenado Obispo Por Dios

Roma, 29 febrero 2004


1er Domingo de Cuaresma

P.D. Si queréis conocer la historia de las apariciones de la Madre de la Eucaristía, de los milagros eucarísticos y nuestra historia, podéis acceder a nuestro sitio en Internet, tecleando la siguiente dirección telemática: www.madredelleucaristia.it