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Misterios del Santo Rosario

Texto elaborado por el Obispo Claudio Gatti y de la vidente Marisa Rossi

MISTERIOS GOSOZOS

1er. MISTERIO - El Angel Gabriel anuncia a María virgen esposa llena de gracia, aquello que ya sabía: Dios la había elegido desde la eternidad para que se convirtiera en la Madre del Verbo. María conocía que sufriría mucho y, a pesar de esto, renueva el "Fiat" que había pronunciado desde el primer instante en el cual había tenido uso de razón. Por el "Sí" de María, Dios Hijo se encarna en el vientre virginal.

2o. MISTERIO - María acompañada de su esposo José, se pone en camino solícitamente para ayudar a su prima Isabel. El Mesías, presente en el vientre virginal de María, santifica al precursor Juan, presente en el vientre de su madre. Isabel, llena del Espíritu Santo, proclama a María Madre del Señor y la Santísima Virgen responde cantando el himno al amor: El "Magnificat".

3er. MISTERIO - El hijo de Dios nace en la gruta de Belén, como había sido profetizado por Miqueas. Los ángeles alaban al Niño - Dios. Los pastores se acercan a la gruta para encontrar al Mesías y regresan a sus casas glorificando y loando al Señor por cuanto habían visto y oído. Pasados 8 días el niño viene circuncidado y le es dado el nombre de Jesús, como había sido anunciado por el ángel. En el día de la circuncisión Jesús, dirigiéndose a su Madre, le dice: "Tú eres Madre de La Eucaristía".

4o. MISTERIO - La Madre de La Eucaristía y su esposo José presentan a Jesús al Padre único y verdadero, siendo Jesús mediador entre Dios y el Hombre. María es purificada y Simeón le anuncia, movido por el Espíritu Santo, que debía sufrir unida a su hijo Jesús.

5o. MISTERIO - La Sagrada Familia va desde Nazaret a Jerusalén para la fiesta de Pascua. Durante el viaje de regreso, La Madre de La Eucaristía y José pierden a su hijo Jesús. Los progenitores encuentran en el templo a Jesús, que contaba con 12 años, y lo escuchan mientras habla a los doctores. Los tres regresan a Nazaret donde Jesús "Crecía en sabiduría, estatura y gracia en unión con Dios y los hombres".

 

MISTERIOS DOLOROSOS

1er. MISTERIO - Jesús después de haber instituido el sacramento de La Eucaristía y del sacerdocio, va a orar en el huerto de Getsemaní donde entra en agonía, suda sangre y es confortado por un ángel. Ha querido por amor a nosotros padecer el sufrimiento más grande, aquel que solo él podía infligirse: no sentirse amado del Padre. Traicionado por Judas y abandonado por los apóstoles es arrestado por las guardias de los grandes sacerdotes.

2o. MISTERIO - Jesús es condenado por el Sanedrín, delante del cual afirma ser el hijo de Dios. Después es arrastrado hasta el gobernador romano. Pilatos, a pesar de reconocerlo inocente, condena a Jesús a la flagelación, porque piensa con esta obligación calmar a los miembros del Sanedrín. La flagelación romana era el más feroz instrumento de tortura.

3er. MISTERIO - Jesús es coronado con un manojo de espinas, le es puesta una caña entre las manos y viene revestido con un manto. Es insultado, escarnecido, escupido y tratado como rey de burla. Los soldado golpean con la caña la corona de espinas para hacerlas penetrar más en la cabeza del Salvador.

4o. MISTERIO - Jesús es condenado a muerte y se dirige hacia el calvario. Es ayudado por el Cireneo a cargar la cruz; es seguido por un gran gentío y consolado por las mujeres piadosas. La Madre de La Eucaristía en silencio acompaña a su hijo Jesús al Golgota y dirige una mirada de amor y de aliento a los pocos que se acercan al condenado para compadecerlo.

5o. MISTERIO - Jesús es crucificado, insultado y escarnecido. Asegura el paraíso al ladrón arrepentido, confía su Madre a Juan y Juan a su Madre. Invoca el perdón para sus propios verdugos, se abandona al Padre y muere. Un soldado traspasa con la lanza el costado de Jesús y de la herida salen sangre y agua. Juan que ha visto da testimonio y su testimonio es verdadero, él sabe que dice la verdad, con el fin de que nosotros creamos.

 

MISTERIOS GLORIOSOS

1er. MISTERIO - Jesús resucita y pasa a través del sepulcro cerrado. La resurrección de Jesús sucede en el más absoluto silencio y en medio a la indiferencia y hostilidad de los hombres. Solo María vigila, ora y espera la resurrección; a ella de primera aparece Jesús, glorioso y triunfante. Sucesivamente aparece a las mujeres, a los discípulos de Emaus, a los once y a los otros que estaban con ellos.

2o. MISTERIO - Jesús invita a los apóstoles del mundo a continuar su misión. Asegura que permanecerá con sus discípulos todos los días hasta el fin del mundo. Jesús está realmente presente en cuerpo, sangre, alma y divinidad en La Eucaristía; La Eucaristía hace la Iglesia. El hijo de Dios, bajo la mirada de La Madre de La Eucaristía, de los apóstoles y de los discípulos, asciende al cielo desde donde ha bajado y regresa al Padre.

3er. MISTERIO - El Espíritu Santo, prometido por Jesús, desciende sobre La Madre de La Eucaristía y los apóstoles reunidos en el cenáculo. María Madre de La Eucaristía, se convierte en Madre de la Iglesia que nace en el día de Pentecostés. Sus poderosas oraciones han acelerado la venida del Espíritu Santo que enseña cada cosa a los apóstoles y los hace fuertes y auténticos testimonios del Cristo Palabra y del Cristo Eucaristía.

4o. MISTERIO - La Madre de La Eucaristía que ha estado siempre unida al sufrimiento de su hijo Jesús, quiere compartir con El también la experiencia de la muerte.

María muere, se transfigura inmediatamente y es asunta en el cielo en cuerpo y alma. Jesús, José, los ángeles y los santos la introducen a la gloria del Paraíso.

5o. MISTERIO - La Madre de La Eucaristía es declarada por la Santísima Trinidad Reina del Cielo y de la Tierra. María es verdadera reina, pero sin corona, porque quiere ir al encuentro de sus hijos con la dulzura de la maternidad y no con el poder de la realeza. María es la Reina porque su hijo Jesús ha puesto en manos de la Madre su poder.

MISTERIOS DE LUZ

1er. MISTERIO (El bautismo de Jesús por Juan Bautista) - Jesús, el Cordero sin mancha, se ha puesto en fila con los pecadores arrepentidos para recibir el bautismo de Juan. El Redentor ha realizado un gran acto de amor y de humildad para enseñar a los hombres que el único camino para llegar a Dios es el de la conversión. Jesús entró en el Jordán, esperó su turno y salió del Jordán rezando, porque la oración favorece la comunión entre el Creador y la criatura. Toda persona que vive en gracia es hijo de Dios y a ella se le pueden dirigir las mismas palabras que el Padre dirigió a su Divino Hijo: "Tú eres mi hijo predilecto, en ti me he complacido" (Mc. 1, 11).

2o. MISTERIO (Jesús realiza el primer milagro en las bodas de Canaán por intercesión de María) - El breve diálogo, ocurrido entre madre e hijo, puede originar una interpretación equivocada. Jesús no se opone a su madre, que le pide que haga un milagro, sino al contrario, quiere hacernos comprender que la respeta y acoge su petición de gracias; de otro modo la Virgen no habría ordenado a los sirvientes: "Haced lo que os diga" (Jn. 2,5).

3er. MISTERIO (Jesús anuncia el reino de Dios invitándonos a la conversión) - El Divino Maestro predicó que, para ser sus discípulos, es necesario un cambio total de nuestro modo de ser y de actuar. Tenemos que abandonar las categorías mentales del mundo y vivir, sin excepciones, el gran mandamiento del amor extendiéndolo indistintamente a todos. El amor es el pasaporte para el Paraíso.

4o. MISTERIO (Jesús se trasfigura en el Tabor delante de sus tres apóstoles) - Jesús se trasfiguró en presencia de Pedro, Jaime y Juan para que después enseñasen a todos los hombres que Él es el Hijo de Dios, el enviado del Padre, el Mesías esperado desde siglos. Si queremos manifestar a los otros que somos realmente hijos de Dios, tenemos que vivir en gracia y no mancharnos el alma con el pecado mortal. Cuánto más aumentemos la gracia, más nos asemejaremos a Dios. María, la llena de gracia, es la criatura que más se asemeja a Dios.

5o. MISTERIO (Jesús instituye la Eucaristía durante la Última Cena) - Jesús, mientras estaba sentado en la mesa con los apóstoles, pensaba en el sacrificio cruento que, dentro de pocas horas, ofrecería al Padre en el Calvario. Jesús es Dios y para él no hay diferencia entre pasado, presente y futuro. Hizo actual el futuro e instituyó la Eucaristía, misterio que comprende su pasión, muerte y resurrección. Igualmente hace presente lo que es pasado y podemos afirmar que Jesús padece, muere y resucita en cada S. Misa que se celebra en épocas diferentes y en lugares distintos. María estaba ciertamente presente en el Cenáculo, cuando Jesús instituyó la Eucaristía y el Orden Sacro, dos sacramentos que existen uno en función del otro.